Decisión histórica la que se ha adoptado en la mañana del Domingo de Resurrección en Villanueva de la Serena con la suspensión de la procesión de ‘La Carrerita’, debido a la persistente lluvia que caía a la hora prevista de la popular carrera de la Aurora al encuentro del Cristo Resucitado.

El tremendo aguacero obligó a las hermandades del Cristo Resucitado y de la Virgen de la Aurora a suspender la procesión. Una decisión adoptada de forma unánime.

Fue en torno a las 9.25 de la mañana, cuando el hermano mayor de la hermandad de la Virgen de la Aurora, Juan Vicente Manchado, cogió el micrófono y desde el balcón del Ayuntamiento de Villanueva comunicó a los vecinos presentes en la Plaza de España la decisión adoptada. Una medida que fue acogida con división de opiniones.

“Hemos tomado la decisión de suspender la Carrerita porque no podemos arriesgarnos. La verdad es que el tiempo no nos deja. De verdad que yo lo siento mucho más que todos vosotros pero no podemos arriesgarnos a que la Virgen se caiga o a que alguno se resbale porque las condiciones climáticas no nos dejan hacerlo. Muchas gracias a todos por la mañana, por el tiempo que habéis estado aquí mojándoos, pero nos hemos visto obligados a tomar esta decisión, sobre todo, por motivos de seguridad”. Estas son las palabras que dirigió Manchado a los asistentes, la mayoría de los cuales se refugiaba en los soportales de la plaza, aunque también había algunos que aguantaron estoicamente bajo sus paraguas.

Desde de la Hermandad del Cristo Resucitado también se consideraba esta medida la más apropiada, y más teniendo en cuenta que su imagen es la primera que sale desde su capilla y además tenía que estar esperando unos minutos a la altura de Pedro de Valdivia, como marca la tradición. Un ritual que debido a la lluvia era imposible realizar.

El propio Juan Vicente Manchado se aventuró a afirmar que se trataba del primer año en la historia que no se ‘corría’ ‘La Carrerita’ ni se realizaba el encuentro.

Las noventa personas que habían resultado agraciadas con los espacios en los balcones municipales también se llevaron una gran desilusión. Aunque sin duda no era comparable a la de Pedro Benítez, Francisco Fernández de los Ríos, César de Miguel Casanueva y José Antonio Gutiérrez de Tena, que  eran los cuatro hermanos de la Aurora que habían sido elegidos mediante sorteo para correr a la Virgen.

La jornada del Domingo de Resurrección ha continuado con la celebración de una misa en la Iglesia de la Asunción, en la que sólo ha estado presente la imagen de la Aurora.