La novela titulada 'Una historia perdida', de la vitoriana Marisol Ortiz de Zárate, y la narración  corta 'Mamá duerme la siesta', de la madrileña Beatriz Olivenza, se proclamaron ganadoras del XXXII Premio Literario Felipe Trigo que se falló en la noche del viernes en Villanueva de la Serena el transcurso de una gala literaria que estrenaba formato.

En esta ocasión, se apostó por una gala literaria, sin cena, que se celebró en el Espacio para la Creación Joven de Villanueva de la Serena, de algo más de una hora y media de duración, que presidió el presidente de la Junta de Extremadura, José Antonio Monago, y que culminó con un vino de honor para los asistentes al acto.

La gala literaria la presentó el escritor y periodista Benjamín Prado; que al principio entrevistó a los dos ganadores de la anterior edición, Bernardo Pilatí y Noemí Sagubal. Pese a todo, durante la noche no se perdieron los típicos descartes.

El jurado, integrado por siete personas, lo presidió la escritora Clara Sánchez. Ésta señaló que la novela se dictaminó por mayoría, mientras que la narración corta por unanimidad.

Como indicó la presidenta del jurado, Clara Sánchez, la novela ganadora es una obra que gira en torno a  “la memoria como problema físico". Asimismo, añadió que se trata de un trabajo de "intriga y lenguaje muy logrados".  Además, se valoró la “gran complejidad narrativa y estilística con la que aborda la búsqueda de identidad de una mujer”.

De la narración corta, Sánchez destacó "el compromiso social y literario" del relato ganador ya que consigue "acercar a los lectores a problemas actuales y candentes como la pederastia, la inmigración, la soledad o la marginación, a través de unos personajes profundamente humanos". Además contiene “un suspense que convierte a esta narración en inolvidable”.

Al acto asistió el presidente del Gobierno de Extremadura, José Antonio Monago; y el alcalde de Villanueva de la Serena, Miguel Ángel Gallardo, entre otros. Ambos, no dejaron escapar esta cita para hacer una serie de precisiones o demandas.

Por un lado, Gallardo agradeció la presencia de Monago y deseó que este acto sea durante los años siguientes “una cita ineludible en tu agenda, pues el Felipe Trigo cautiva”. Por su parte, no quiso desaprovechar la oportunidad el primer edil para sacar a colación el polémico asunto del cambio “repentino e injustificado” de la ubicación del nuevo hospital y en este sentido apeló a la “sensibilidad” del máximo mandatario regional para que el centro sanitario no se ubique “atendiendo a un criterio localista”.

Monago encajó la petición de Gallardo del hospital como una “práctica de ‘fair-play y por tu pasión por Villanueva”, sin embargo le precisó que “el futuro hospital comarcal Don Benito-Villanueva se hará en el lugar que mejor convenga no a una localidad, sino al conjunto del pueblo extremeño y lo que haya que explicar se explicará en su momento y teniendo en cuenta la luz que tienen que arrojar los informes técnicos pertinentes”.

En materia literaria,  además de confirmar el compromiso de la Junta al premio literario de Villanueva, el presidente regional también anunció que el próximo miércoles 19, se va a presentar una nueva línea editorial de la Editora Regional de Extremadura consistente en una colección de literatura infantil y juvenil que contará con escritores e ilustradores "de reconocido prestigio".