Un programa de nuevo suelo industrial en Don Benito es aprobado en pleno, donde dos asistentes han sido expulsados
El pleno del Ayuntamiento de Don Benito ha consensuado hoy la aprobación definitiva del programa de ejecución para el desarrollo del nuevo sector de suelo industrial 1.5 en una sesión extraordinaria que tampoco ha estado exenta de polémica.
Las respectivas parcelas están situadas concretamente en el polígono 28 en parcelas 1, 2 y 3, y en el polígono 210 parcelas 5.003 y 5.016.
Una aprobación definitiva que, según el concejal de Urbanismo Francisco Javier Sánchez-Porro, se podría haber aprobado el 4 de junio de 2023, y pregunta si fue una maniobra electoralista, recordando que el anterior alcalde socialista, José Luis Quintana, anunció en rueda de prensa que el polígono estaría en marcha a finales de 2023 o principios de 2024.
Por su parte, el concejal socialista, Enrique Talavera, ha respondido que no se aprobó en su día porque el gobierno socialista estaba gobernando en funciones en aquella fecha, ya que se trataba de días antes de ceder el bastón de mando a Siempre Don Benito y Partido Popular. Por lo que no consideraban correcto aprobarlo.
Además, ha reprochado al gobierno el haberles acusado de oscurantismo respecto a documentos e información, cuando le parece curioso que «ahora han encontrado estos documentos en un cajón».
Por otra parte, ha hecho hincapié en que se trata de un proyecto de José Luis Quintana y Guillermo Fernández Vara, por lo que, finalmente, el punto ha sido aprobado por unanimidad.
Por su parte, la alcaldesa, María Fernanda Sánchez ha espetado a los concejales socialistas que «no tienen fuerza moral, puesto que la ineptitud y la dejadez de funciones, que ha dejado a Don Benito destrozado, ha sido por parte del Partido Socialista de Don Benito».
Ha sido en ese momento cuando, al pronunciar estas palabras, la primera edil ha requerido la presencia policial para expulsar del pleno a dos personas del público, alegando que «estaban ofendiendo a la presidencia y al público, y se estaban burlando mediante un lenguaje corporal de los representantes del pueblo».
Una actuación que ha sido tachada de «dictatorial» por parte de los expulsados y de los demás miembros de la Asociación por la Fusión Don Benito-Villanueva.